Es posible que más o menos se cumplan las previsiones que un analista predijo hace más de un año. En su informe, Goldman Saschs dijo que algún día AMD dejaría de fabricar procesadores, GPUs, chipsets... y se limitaría a diseñarlos para luego encargar la fabricación a un tercero.
Actualmente, el nuevo presidente ejecutivo de AMD, Dirk Meyer, ha expuesto en una entrevista a un periódico que AMD se deshará de sus operaciones de fabricación de chips en cuestión de meses como parte de la activa estrategia inteligente. Según su declaración, la parte encargada de la fabricación en sí se separaría en una nueva empresa con un nuevo propietario diferente de AMD. Quedaría por ver si habría uno o dos propietarios de AMD, o si la empresa "madre" sólo le daría a su escisión algunos ofrecimientos públicos y nuevas acciones. Es posible incluso que AMD venda su fábrica de Dresden, Alemania, aunque es uno de los detalles que se deberían revelar a lo largo de los siguientes meses.
También hizo alusiones en relación al antiguo presidente ejecutivo de AMD, Héctor Ruiz, afirmando que sería el hombre del planeta más decepcionado si no tuviera lugar para final de año esta separación y que él (Dirk Meyer) sería el segundo hombre más decepcionado en ese caso. Afirma que deben quitarse de encima esa nube como sea, relativa a la viabilidad económica de AMD.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que la fabricación con instalaciones propias permite a los desarrolladores adaptar mejor sus diseños a los procesos de fabricación, lo que en última instancia implica mejor rendimiento y tiempo de puesta a punto en el mercado cada vez más raudo.
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